El saludo de los indígenas de la Sierra Nevada con la hoja de coca simboliza la hermandad, confianza y equivalente a un apretón de mano. La Sierra Nevada de Santa Marta, en Colombia, es un lugar mágico y sagrado, hogar de cuatro grupos indígenas únicos: los Kogui, Arhuaco, Wiwa y Kankuamo. Estas comunidades han preservado sus tradiciones ancestrales durante siglos, y una de las prácticas más fascinantes es su forma particular de saludarse. Este saludo no solo es un gesto de cortesía, sino un acto profundo que simboliza confianza, hermandad y respeto. En este artículo, exploraremos en detalle cómo los hombres de estas comunidades utilizan la hoja de coca deshidratada, almacenada en una mochila llamada Subultú, para saludarse y fortalecer los lazos comunitarios.

Los saludos y la Importancia de la Hoja de Coca en la Cultura Indígena
La hoja de coca no es solo una planta para los indígenas de la Sierra Nevada; es un elemento sagrado que conecta lo espiritual con lo cotidiano. Desde tiempos ancestrales, la coca ha sido utilizada en rituales, ceremonias y como alimento energético durante largas jornadas de trabajo o caminatas por las montañas. Sin embargo, su uso va más allá de lo práctico: es un símbolo de identidad y unión.
Los hombres mayores de edad, quienes han recibido el Poporo como símbolo de adultez, son los únicos autorizados para masticar la hoja de coca y participar en este ritual de saludo. Este acto no es casual; representa la madurez, la responsabilidad y el respeto hacia las tradiciones de la comunidad.

El Proceso de Deshidratación de la Hoja de Coca
El proceso para preparar la hoja de coca es un ritual en sí mismo. Primero, se calienta una roca de aproximadamente un kilo en una fogata. Luego, esta roca caliente se introduce en una mochila de fique junto con una libra de hojas de coca crudas. El calor de la roca evapora la humedad de las hojas, dejándolas secas y listas para su uso.
Este método tradicional no solo preserva las propiedades de la hoja, sino que también refleja el profundo conocimiento que estas comunidades tienen sobre su entorno. La mochila de fique, conocida como Subultú en lengua Kogui, es más que un contenedor; es un objeto cargado de significado cultural y espiritual.

El Saludo con Hoja de Coca: Un Acto de Confianza y Hermanda
Cuando dos hombres de estas comunidades se encuentran, el saludo va más allá de un simple «hola». El intercambio de hojas de coca es un gesto que simboliza confianza, respeto y hermandad. Al compartir la hoja, se está compartiendo no solo un alimento, sino también un pedazo de su identidad y cultura.
Este saludo es especialmente importante cuando alguien llega a una comunidad o visita una región diferente. Antes de entablar cualquier conversación, el visitante debe saludar a cada uno de los presentes, entregando una porción de hoja de coca. Este acto refuerza los lazos comunitarios y asegura que, antes que las palabras, prevalezca el sentido de unidad.

Reglas y Significado del Saludo Tradicional
El saludo con hoja de coca está regido por normas estrictas que reflejan el profundo respeto que estas comunidades tienen por sus tradiciones. Solo los hombres mayores de edad, quienes han recibido el Poporo, pueden participar en este ritual. Las mujeres y los niños están excluidos de esta práctica, ya que se considera un acto reservado para aquellos que han alcanzado la madurez espiritual y social.
Además, el saludo debe realizarse de manera individual. No es aceptable saludar a un grupo en general; cada persona debe ser reconocida y honrada con un intercambio personal de hojas de coca. Este proceso puede llevar tiempo, pero para los indígenas de la Sierra Nevada, la paciencia y el respeto son valores fundamentales.

El Simbolismo del Subultú y la Hoja de Coca
La mochila Subultú no es solo un objeto funcional; es un símbolo de la conexión del hombre con la naturaleza y con su comunidad. Al llevar consigo la hoja de coca, los hombres de estas comunidades están preparados para compartir, trabajar y honrar sus tradiciones en cualquier momento.
La hoja de coca, por su parte, representa la vida, la energía y la espiritualidad. Al compartirla, se está compartiendo un pedazo de la esencia misma de la cultura indígena. Este acto refuerza la idea de que, en la Sierra Nevada, la comunidad y la naturaleza están intrínsecamente ligadas.
La Exclusividad del Saludo y su Impacto en la Comunidad
El hecho de que este saludo esté reservado solo para los hombres mayores de edad tiene un profundo significado. Representa la transición a la adultez y la responsabilidad que conlleva ser un miembro activo de la comunidad. El Poporo, que reciben los hombres al alcanzar la madurez, es un símbolo de esta transición y un recordatorio constante de su papel en la preservación de las tradiciones.
Para las mujeres y los niños, aunque no participan en este saludo, existen otras formas de expresar respeto y hermandad. Cada miembro de la comunidad tiene un rol específico que contribuye al equilibrio y la armonía del grupo.

Cómo este Saludo Refleja la Filosofía de Vida Indígena
El saludo con hoja de coca es más que una tradición; es una expresión de la filosofía de vida de los indígenas de la Sierra Nevada. Para ellos, la vida no se trata de acumular riquezas o competir, sino de compartir, respetar y mantener el equilibrio con la naturaleza.
Este acto de saludo refleja la importancia de la comunidad sobre el individuo. Antes de hablar de negocios o problemas, es esencial fortalecer los lazos humanos. Esta práctica es un recordatorio poderoso de que, en un mundo cada vez más individualista, existen culturas que aún valoran la conexión humana por encima de todo.
Conclusión
Los saludos tradicionales de los indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta son una ventana a su rica cultura y su profunda conexión con la naturaleza. A través del intercambio de hojas de coca, estas comunidades refuerzan los valores de confianza, hermandad y respeto que son fundamentales para su forma de vida. Este ritual, reservado para los hombres mayores de edad, es un recordatorio de la importancia de preservar las tradiciones ancestrales en un mundo en constante cambio.
Al entender y respetar estas prácticas, no solo honramos a estas comunidades, sino que también aprendemos valiosas lecciones sobre la importancia de la conexión humana y el equilibrio con el entorno. La Sierra Nevada de Santa Marta no es solo un lugar geográfico; es un tesoro cultural que nos invita a reflexionar sobre nuestra propia relación con el mundo y con los demás.